Animales de Diferentes Edades y Categorías:
Cuando se agrupan cabras adultas con crías, se corre el riesgo de golpear a
las más pequeñas. Si se agrupan cabras preñadas con cabras horras (forras)
pueden ocurrir abortos por golpes y corneadas. Si se mantienen cabritos no
castrados con cabritas se corre el riesgo de que preñen a cabras muy jóvenes o
con parentesco cercano. Los cabritos que no van a ser usados como semental,
deben castrarse a los 2 meses de edad.
Si se tienen muchas cabras se aconseja atender al rebaño por grupos: uno sólo
de cabras gestantes, otro con cabras paridas, otro con cabras horras junto a
cabritas que ya se puedan preñar y un grupo de desarrollo con cabritas en
crecimiento y cabritos de engorde castrados. Los cabritos jóvenes no castrados
deben mantenerse aparte al igual que los sementales.
Falta de Registros:
La organización es parte clave de la crianza de las cabras.
Sin registro no hay control de nacimientos, montas y partos,
por lo que no sabremos si una cabra está gestante o no, ni
podemos ayudarla a parir si lo necesita, no se sabe cuando
desparasitar y vitaminar, ni cuanto se va a producir.
Mantener Animales Improductivos:
Las cabras que no producen (cabras viejas, motas, infértiles, malas criadoras, etc.)
consumen la comida y ocupan el espacio de las que producen. Eliminarlas del
rebaño contribuye a un mejor aprovechamiento del espacio y la alimentación.
Otros Factores Predisponibles:
La Edad:
Los recién nacidos y los animales jóvenes se enferman con mayor facilidad ya
que no tienen desarrolladas sus defensas por lo que necesitan lugares limpios
y con buena protección.
El Sexo:
Las hembras en producción son más propensas a enfermarse puesto que su
energía se ocupa en la elaboración de leche, así sus defensas pueden debilitarse
y los microbios aprovechan para causar enfermedades.
La Herencia:
Las cabras más encastadas (con mayor sangre pura, según la raza) son más
delicadas que las indias o criollas, es decir, se enferman con mayor facilidad al
estar menos adaptadas al ambiente.
Compras de Animales sin Control Sanitario:
Cuando se compran animales que provienen de lugares desconocidos, se corre
el riesgo de introducir enfermedades nuevas en un lote.
Compre o intercambie animales que tengan pruebas de brucelosis y otras
enfermedades contagiosas. Si se traen animales de otro lugar manténgalos
separados durante un tiempo (40 días como mínimo) observándolos si se
enferman o no, antes de mezclarlos con el rebaño.
Fuente:PDF/ Guia para el manejo sanitario y reproductibo de las cabras/ FAO/PESA
Cuando se agrupan cabras adultas con crías, se corre el riesgo de golpear a
las más pequeñas. Si se agrupan cabras preñadas con cabras horras (forras)
pueden ocurrir abortos por golpes y corneadas. Si se mantienen cabritos no
castrados con cabritas se corre el riesgo de que preñen a cabras muy jóvenes o
con parentesco cercano. Los cabritos que no van a ser usados como semental,
deben castrarse a los 2 meses de edad.
Si se tienen muchas cabras se aconseja atender al rebaño por grupos: uno sólo
de cabras gestantes, otro con cabras paridas, otro con cabras horras junto a
cabritas que ya se puedan preñar y un grupo de desarrollo con cabritas en
crecimiento y cabritos de engorde castrados. Los cabritos jóvenes no castrados
deben mantenerse aparte al igual que los sementales.
Falta de Registros:
La organización es parte clave de la crianza de las cabras.
Sin registro no hay control de nacimientos, montas y partos,
por lo que no sabremos si una cabra está gestante o no, ni
podemos ayudarla a parir si lo necesita, no se sabe cuando
desparasitar y vitaminar, ni cuanto se va a producir.
Mantener Animales Improductivos:
Las cabras que no producen (cabras viejas, motas, infértiles, malas criadoras, etc.)
consumen la comida y ocupan el espacio de las que producen. Eliminarlas del
rebaño contribuye a un mejor aprovechamiento del espacio y la alimentación.
Otros Factores Predisponibles:
La Edad:
Los recién nacidos y los animales jóvenes se enferman con mayor facilidad ya
que no tienen desarrolladas sus defensas por lo que necesitan lugares limpios
y con buena protección.
El Sexo:
Las hembras en producción son más propensas a enfermarse puesto que su
energía se ocupa en la elaboración de leche, así sus defensas pueden debilitarse
y los microbios aprovechan para causar enfermedades.
La Herencia:
Las cabras más encastadas (con mayor sangre pura, según la raza) son más
delicadas que las indias o criollas, es decir, se enferman con mayor facilidad al
estar menos adaptadas al ambiente.
Compras de Animales sin Control Sanitario:
Cuando se compran animales que provienen de lugares desconocidos, se corre
el riesgo de introducir enfermedades nuevas en un lote.
Compre o intercambie animales que tengan pruebas de brucelosis y otras
enfermedades contagiosas. Si se traen animales de otro lugar manténgalos
separados durante un tiempo (40 días como mínimo) observándolos si se
enferman o no, antes de mezclarlos con el rebaño.
Fuente:PDF/ Guia para el manejo sanitario y reproductibo de las cabras/ FAO/PESA